Rystad Energy estima que, para esa fecha, más del 75% de la demanda total se cubrirá con combustibles fósiles, con el consiguiente aumento de las emisiones
A pesar de la aceleración de la transición energética, el petróleo y el gas seguirán siendo fundamentales en la combinación energética mundial en un futuro previsible, ya que las principales fuentes de hidrocarburos siguen satisfaciendo la demanda mundial de energía primaria, que se prevé que supere los 650 exajulios (EJ) en los próximos años. Rystad Energy estima que, para 2030, más del 75% de la demanda total se cubrirá con combustibles fósiles, con el consiguiente aumento de las emisiones.
Una parte importante de estas emisiones procederá de las actividades previas, en particular la extracción de hidrocarburos y la quema de gas. Aproximadamente tres cuartas partes de estas emisiones estarán relacionadas con el proceso de extracción de hidrocarburos, mientras que la cuarta parte restante procederá de la quema de gas. Se prevé que en los próximos años estas emisiones supondrán unos 1.100 millones de toneladas anuales de dióxido de carbono equivalente (CO2e).
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